viernes, 21 de octubre de 2011

Finaliza el relato


“Érase una vez, en Bagdad, un criado que servía a un rico mercader. Un día, muy de mañana, el criado se dirigió al mercado para hacer la compra. Pero esa mañana no fue como todas las demás, porque esa mañana vio allí a la Muerte y porque la Muerte le hizo un gesto.

Aterrado, el criado volvió a casa del mercader.

-Amo -le dijo-, déjame el caballo más veloz de la casa. Esta noche quiero estar muy lejos de Bagdad. Esta noche quiero estar en la remota ciudad de Ispahán.

-Pero ¿por qué quieres huir?

-Porque he visto a la Muerte en el mercado y me ha hecho un gesto de amenaza.

El mercader se compadeció de él y le dejó el caballo, y el criado partió con la esperanza de estar por la noche en Ispahán.

Por la tarde, el propio mercader fue al mercado y, como le había sucedido antes al criado, también él vio a la Muerte.

-Muerte -le dijo acercándose a ella-, ¿por qué le has hecho un gesto de amenaza a mi criado?...”
...La muerte le dijo...- se fue porque le amenace, porque cada vez que viene al mercado a comprar, en vez de comprar roba para hacer la comprar desde hace 15 años, nunca le pillan pero llevo observándole desde hace 14 años y ya me he cansado de que robe a los más necesitados.

El mercader le respondió- no sabía nada pero le castigare yo como es merecido, no matándole Señor Muerte, porque es mi mejor criado, mi amigo fiel y espero que lo entienda.

La muerte le dijo- tiene que darse prisa porque le puse una trampa para que él se cayera por un barranco y muriese.

El mercader corrió hasta su casa para coger el segundo caballo más veloz que tenia, y se puso en marcha desierto arriba.


A las 3 horas vio al caballo que le dejo a su criado, pero el criado no estaba y empezó a gritar ¡¡¡Amín!!! ¡¡¡Amín!!!.

Al rato ya escucho mi señor estoy aquí en el barranco agarrado de una piedra ¡¡¡ayúdeme!!!

El mercader le dijo...- sé lo que has estado haciendo estos últimos 15 años no sé porque lo haces, creo que te trato como uno más de mi familia, entonces he hablado con la muerte y le dije que te iba a poner un castigo severo porque no te quiero perder, en el mismo instante que el mercader paraba de hablar, la muerte apareció y le dijo a Amín - te salvara porque te quiere, pero como te vuelva a ver qué cometes algún pecado no tendrás opción, morirás en ese mismo instante.

El mercader le saco del barranco y los dos se fueron juntos a Bagdad.

El mercader le dijo que se iba a tirar un año entero limpiando, cocinando y dándole masajes el solo sin la ayuda de nadie. 

Amín admitió el castigo y le dijo gracias amigo mío por tratarme como uno de tu familia como si fuera uno más de clase media y no de clase baja, por no hacerme sentir escoria y si hacerme sentir importante, no sé cómo te lo podre compensar... el mercader le dijo me lo puedes compensar diciéndome donde has metido el dinero que te daba. 

Amín le dijo...- cuando lleguemos a casa te lo enseñare.

Al cabo de tres horas llegaron a casa y Amín fue a la parte de atrás y le enseño en lo que se lo había gastado, que era una fuente...y un nuevo establo.

El mercader le dijo gracias y le dio un abrazo.

 

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